He de confesar que
el cine ha sido una fuente de aprendizaje para mí. Desde mi adolescencia y
juventud he sacado muy buenas enseñanzas de muchas películas. Sin saber cómo y
por qué he sabido distinguir la realidad de lo meramente fantasioso o
idealista, y aplicarlo a lo real y concreto de la vida. Creo entender lo real
de lo aparente e imaginario; de lo supuesto o lo fantasioso.
Es evidente que todo eso está apoyado en una buena película, porque, la realidad es que hay mucha basura de la que es imposible sacar buenas y éticas conclusiones. De cualquier forma, lo importante es encontrarlas; saberlas buscar y mirarlas con ojos, atención y atenta escucha. Todas ellas esconden acontecimientos y cosas que podemos extrapolar a nuestra época actual. Sobre todo, respecto a la verdad, lo trascendente - que es lo que verdaderamente importa - y la libertad. Porque, donde hay libertad hay paz. La primera película que les voy a ofrecer es: «La locura del dólar» https://www.filmaffinity.com/es/film727567.html donde disfrutaremos, al menos a los que le gusta, de la cultura del vestido. Apreciamos como se vestían nuestros abuelos y padres, y el gran respeto que había a estar bien vestido y presentado. Y observaremos como en nuestro tiempo ese respeto y buena presencia se ha ido perdiendo.
Por otro lado
veremos como las infidelidades están siempre presentes. Una veces por unos
motivos y otras por desatención conyugal por uno de los cónyuges. Sin embargo, descubrimos
como el respeto y las buenas formas antes estaban más presentes, y hoy casi han
desaparecido, e incluso se toman por normales. Nunca olvidemos que lo normal no
es siempre lo correcto,
También notaremos
como la fidelidad está muy presente en la amistad, en y a aquellas personas que
nos merecen un respeto. Pero, al mismo tiempo descubrimos como la ambición – no
sólo es de antes, sino que siempre ha estado presente en la vida del hombre – e
interviene en la conducta y la vida de los seres humanos.
En todo esto tiene
mucha culpa: los juegos, vicios, engaños, sospechas, mala información, falta de
escucha, poca fe en la misericordia …etc. Todos estos pecados y, exclusión de
valores, ocasionan consecuencias en uno u otro sentido en la vida de las
personas.
Por otro lado, tus buenas obras siempre tendrán recompensan y siempre, tarde o temprano, vencerán. Es posible que en muchos casos no lleguemos a verlo, respecto a nuestra vida propia, pero ten seguro que siempre habrá una recompensa de Amor y Misericordia de nuestro Padre Dios.
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