SOBRE IMAGENES

Este blog toma las imágenes de Google - Pinterest - para sus reflexiones sobre inquietudes y otros acontecimientos alumbrados desde el Evangelio. Pide de antemano permiso para ello y de no ser así ruego ser avisado para retirarlas.
Gracias.

miércoles, 9 de agosto de 2017

ANTE EL REINO DE DIOS


Es hermoso descubrir el valor de las cosas. Y tan hermoso que, ante una de esas cosas de las que tú sabes su valor, sacrificas algo de ti o de tus bienes, para adquirirla y poseerla. Posiblemente sea una experiencia que cada uno de nosotros haya experimentado. Lo que nos lleva a la conclusión y descubrimiento que, todo aquello que no se experimente, posiblemente no se conozca ni se valore adecuadamente.

Quizás, eso lo sabemos. No decimos nada nuevo, pero una cosa es saber y otra experimentar. Y el experimento sólo se hace en movimiento. Para encontrar hay que buscar, y se busca en la medida que sales de ti mismo y caminas. Aquel campesino encontró un tesoro en un campo que no era de su propiedad, y tan grande le pareció el tesoro encontrado que se puso por obra reunir todo lo necesario para comprar ese campo.

Sin embargo, observamos, como dice el Papa Francisco en su homilía del domingo -30 de julio - que adquirir ese tesoro tan estimable y valioso para el campesino, le exige búsqueda, movimiento, esfuerzo...etc. No se encuentra quieto, acomodado, instalado y sin inquietud. Puede eso cuestionarnos e interpelarnos sobre nuestra actitud de búsqueda y nuestros esfuerzos por encontrarnos y experimentarnos con la presencia del Señor. Porque, quizás, todavía no descubrimos el gran Tesoro que es nuestro Señor Jesús para cada uno de nosotros.

En el otro extremo tenemos, siguiendo la hermosa y clarividente reflexión del Papa Francisco, al mercader, experto en valoraciones y tasaciones de joyas. Mucho tuvo que impresionarle aquella perla encontrada que se planteó inmediatamente en desprenderse de todas las demás para adquirir esa única perla. En ella encontraba todas sus aspiraciones de joyero que le bastaba para ser feliz. ¿Qué experiencia tenemos nosotros? ¿Nos ocurre algo parecido? 

Ese debe ser el síntoma del encuentro con Jesús. Porque, Él es el Reino que nos colma de esperanza, de alegría, de felicidad y gozo eterno. Él es el Tesoro y la Perla que colman todas nuestras aspiraciones y al que debemos tener en el centro principal de nuestra vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario crea comunidad, por eso, se hace importante y necesario.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...