SOBRE IMAGENES

Este blog toma las imágenes de Google - Pinterest - para sus reflexiones sobre inquietudes y otros acontecimientos alumbrados desde el Evangelio. Pide de antemano permiso para ello y de no ser así ruego ser avisado para retirarlas.
Gracias.

martes, 7 de agosto de 2018

MUCHOS ÚLTIMOS SERÁN PRIMERO

Resultado de imagen de sirviendo por amor
El amor es como un hálito que si no se aprovecha en el momento puede evaporarse y desaparecer. Al menos esa es mi experiencia. Muchas vece me viene una idea producto de una emoción vivida y se solidifica en mi mente, pero si no la plasmo enseguida se me pierde. Es, pienso yo, como un suspiro, un soplo del Espíritu que te mueve a expresarlo y compartirlo.

En cierta ocasión, me comentaba un buen amigo, el tesoro que tenía en la casa. No hacía mucho tiempo, pero por casualidades de la vida había llegado a su casa una persona a servir. Poco a poco, como el agua empapa lo que toca, aquella persona fue derrochando honradez, servicio, respeto y trabajo. Se despachaba a su gusto, pero daba más de lo que tenía que dar. Respiraba servicio y amor, porque eso es precisamente lo que es amor.

El amigo llegaba hasta emocionarse cuando hablaba de aquel tesoro que había entrado en su casa. Una persona atenta a las necesidades de los demás y que percibía cuando era necesaria su ayuda. Se adelantaba a la necesidad y, aunque estaba fuera de su responsabilidad y competencia, ella daba un paso adelante y servía a la persona en concreto. Le pregunté a mi amigo si era creyente, y, por lo que me dijo, supuse que como tantos que creemos, pero quizás no practicamos.

Su testimonio me tocó mi pobre corazón, y aunque no lo demostré, comentaba el amigo, sentí dentro de mí un gozo y un agradecimiento desbordante hasta el punto de irremediablemente compartirlo. Entonces, también yo pensé en lo que dijo Jesús, "Así, los últimos serán primeros, y los primeros, últimos" -Mt 20, 16-. Aquella persona, quizás sin saberlo, daba un gran testimonio de amor y un abrazo inmenso a Jesús. Porque cuando se lo hacemos a una persona necesitada, se lo hacemos al Señor. 

No pude resistir preguntarle el nombre de aquella buena persona, y, emocionado me respondió: Manuela. E inmediatamente corrí al ordenador para soltar aquella vivencia que inundaba mi corazón de gozo y alegría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario crea comunidad, por eso, se hace importante y necesario.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...